Valiéndose de recursos documentalistas, de snapshots o tomas espontáneas y una compulsión por fotografiar tanto la escena del rock desde 1996 a los personajes urbanos que lo cautivan a diario junto a escenas de su vida familiar, el fotógrafo y director de videoclips Ezequiel F. Muñoz se erige en un cazador de estilos.


Su infinita galería de imágenes espontáneas admite a los comienzos de Illya Kuryaki and the Valderramas, los primeros shows de Miranda!, los conciertos de Rosario Bléfari junto a Suárez en centros culturales o en bares. De ahí que documentó los estilos entre lxs asistentes a los conciertos en club El Anexo, shows en la peluquería Roho mientras situada en Caballito, ( hay imágenes de Gustavo Cerati junto a Flavio Etchetto con atisbos de ropa deportiva y textiles tecnológicos ,mientras que Leo García usaba remeras Adidas como complemento de su guitarra con stickers de Hello Kitty y un cap de Mickey Mouse). La bitácora hace lugar a la Dj Romina Cohn, a Noelia Mourier junto a Ondas Martenot o el colectivo “Artistas Varias”, un genial proyecto feminista producido por el músico Lucas Martí. Pero además de fotografiar escenas, las relata y recuerda el detrás de escena de cada foto en una conversación con Sucesos de Moda.
“Esta foto de Ale Sergi y Juliana Gattas es de cuando tocaron por primera vez en La Trastienda, estaban todos vestidos de blanco, el triángulo que aparece allí es el perchero. A Juliana la fotografié cuando una amiga periodista me pidió que la acompañara a hacer una nota a una cantante de jazz que estaba empezando. Recuerdo que llevaba un vestido de encajes, tenía los labios con un lápiz labial muy hermoso, yo había llevado una cámara pocket y cuando ella vio mi equipo me miró sorprendida, un tiempo después me contó que usó esa imagen como portada de un cd con sus pistas para conciertos de jazz. Acá tengo una imagen de la artista Iara Kaumann que se la saqué de niña, mientras filmaba los desfiles de Sergio de Loof y ella desfilaba junto a su madre, la diseñadora Miuki Madelaire en el Malba. A Romina Cohn la fotografié para una revista indie de La Plata en la Plaza Alemania; mientras ella posaba con su teclado se empezó a llenar de pibes andando en skate. Saqué dos rollos y fue demasiado para mi presupuesto de entonces”. Ezequiel relata las tomas como si se tratase de un comentarista de usos y costumbres.




Y luego continúa: ” La imagen corresponde a un video que filmé para “Victoria Mil”, Miguel Castro y Julián Della Paolera iban vestidos de granjeros como homenaje a los cowboys del film “Secreto en la montaña” (Ang Lee, 2006)”. Cuando asoman las imágenes de moda de Noe Mourier, advierte;”Siempre me pareció la mejor lookeada de todas las chicas de la escena de la música por su pelo corto que cambiaba de color, las ropas muy elegantes y un estilo particular; le dije que iba a intentar registrar su vestimenta cada vez que la viera.Acá registré a Rosario Bléfari en un show de Suárez en El anexo, un club de la avenida Rivadavia, ella estaba grunge con jean y remera aunque en otras ocasiones la fotografié con ropa para hacer ski”.

En cuanto a los estilos masculinos del rock, Muñoz se remite a las #fotolocofiles# que muestran a Emmanuel Horvilleur circa 1996 :”Emma se puede poner un jean roto del peor lugar y una remera con un agujero que todo le queda bien, porque tiene mucho estilo. Considero que Carca siempre se vistió de un modo increíble, muy glam rock y si no hubiera sido rockero por su porte debió ser modelo, porque deslumbra por su look”.

En algunas ocasiones también ofició de estilista espontáneo para las filmaciones de videos de “Capri” y acompañó a la vestuarista a la Feria Israelita de la calle Jean Jaurés . Su registro se extiende a Horacio Caillaud, el actual diseñador de la firma de zapatos “Terrible Enfant” en su incursión en la banda Ipanema y videoclip mediante. ” H. Siempre fue muy elegante, ahora desde su marca hace los zapatos para Babasónicos y muchos otros músicos, la tienda está situada en el club Arroyo, mientras que su pareja es la diseñadora de “La Jolla”, una zapatería para mujeres.
Sus inicios como fotógrafo de bandas fue una consecuencia directa de su paso ́por una escuela de reporteros gráficos en la búsqueda de fórmulas y ardides para intentar lograr las fotos ganadoras, las que se destinan a las portadas de los diarios, Allí un profesor le asignó la tarea de cubrir una entrega de Premios Martín Fierro como ejercicio de estilo. Los alumnos recurrieron a hacerse falsas credenciales de medios hegemónicos; la de Ezequiel Muñoz refirió a una ficticia pertenencia al staff de colaboradores del diario La Nación . Esa credencial apócrifa le valió acreditarse a conciertos que se anunciaban por entonces en el suplemento Sí del Diario Clarín con la coartada de que estaba colaborando con un suplemento joven en gestación. El ardid le permitió acreditarse mediante fax como reportero para cubrir numerosos conciertos. Pero a diferencia de otros fotógrafos, en lugar de venderlas a medios, él las revelaba y luego se las obsequiaba a los músicos. Aunque hubo algunas excepciones:”El rock fue el lugar donde canalicé mi trabajo, la segunda vez que fui a Obras, propuse fotos a una revista llamada “Salve el fuego realiza” que fue premiada como mejor publicacion en el certamen “Buenos Aires no duerme”.
Acerca de su método, Ezequiel sentencia: como dice un refrán “si conoces a la bestia no te va a morder”, yo tengo que ser amigo para sacar fotos, creo que al estar en un lugar y conocerlos las fotos no son posadas y no aparece la mirada de un intruso”. Para encontrar más pistas de ello, vale remitirse a su libro de fotógrafias de músicos denominado 15 6658 ROCK que en 2007 publicó la editorial “Dos Fuerzas”.


y usadas sin distinción de géneros-
¿Cómo surgió tu afán documentalista?
-Se disparó a los ocho años y como consecuencia de que 8 del 8 del 78 mi viejo jugó a la lotería y ganó. Nos invitó a unas vacaciones en la montaña, y durante un paseo vimos que una familia que estaba en un colectivo a modo de motorhome al irse e dejó una cámara de fotos colgada en un árbol. Me desesperé por apropiarme de ella pero mi viejo me dijo que esperara unos días a que volviésemos al recreo y por si acaso volvían a buscarla. Finalmente fue mi primera cámara ,aunque en la casa de mis padres ya había un cámara de fotos y el rollo duraba se destinaba a fotografiar los hitos de todo un año, para luego revelarlos. Unos años despúes y en mi viaje de estudios de tercer año al sur de la Argentina con mis compañeros acordamos que nos íbamos a intercambiar las fotos que sacáramos. Yo fotografié todos los zapatos que usaban, hice retratos de los choferes y de los profesores y me llamó la atención que nadie quería tener mis fotos. No les interesaban . También cuando había ido al Guido Spano solía sacar fotos a las maestras y de los baños.
-¿Cómo decidiste documentar las remeras que se usaban en Buenos Aires y como registro de un época?
-En principio porque todos mis amigos se vestían con remeras copadas Me encantaba observar las remeras de mis amigos y documentarlas, entre ellos a Andy 16 y a Marcelo Baraj, eran las personas que más remeras tenían, y que no eran de marcas conocidas, Además por la calle iba observando y le decía a la gente que usaba remeras de “La Renga” si podía fotografiarlos para una tapa del disco con la remera que usaban los fans; siempre usaba un verso que se iba adaptando. Con ese criterio a las fans de Diego Torres, les dije que mi hermana era fanática del cantante o bien si veía una foto de Alberto Olmedo argumentaba que mi padre estaba viejito y como era fan de Olmedo se iba a poner contento. Las reacciones eran diversas,. Entonces decidí mandar un mail a todos mis amigos que decía “Sigue-sigue nomás la recopilación de tu remera favorita la REmera. Vos pelás una REmera y yo te saco una foto sólo a la Remera. No se ve la cara. Las REmeras van creciendo gracias a todos los q se contactaron y se coparon, así también me fui dando cuenta de que la cosa se está yendo para otro lado. Si bien esto empezó con remeras q me gustaban a mí y les sacaba una foto, ahora también se convirtió en un catálogo de REmeras, no sólo q me gustan o le gustan al dueño sino q se armó como un catálogo típico de RE. Así han aparecido REmeras q no me imaginaba como las de Homero Simpson, los 3 chiflados, y esto hace proyectar mi pedido al más allá, a saber: busco la remera esmokin` o traje, la de los huesos, sigo con la trilogía de caras onda Xuxa, Rodrigo o Maradona fulberas, algún mikymause en todos sus variantes (meando, punk, esqueleto, haciendo fuk) y grupos de rock, hechas por uds. o por algún amigo/a, la q sea tu favorita pa’ dormir o pa’ salir, la de los esqueletos en todas las poses sexuales, etc. La q más te guste o más odie tu mamá. Marcas de cigarrillos/alcoholes y corporaciones abstenerse, aunque sí esas q deforman marcas como Coca Cola pero q dice cocaine o California; o las de MacDonalds q dice marihuana o lo q sea. Bueno espero tu REmera, avisale a tu amistad favorita (hasta 2 personas por foto se puede). Chau y paz”. El texto llegó a la casilla del crítico Gustavo Alvarez Núñez, quien lo entrevistó para el Suplemento No del diario Página 12
_ ¿Y la posterior muestra de fotos de t-shirts en la Galería de arte “Belleza y Felicidad”?
Vi que Fernanda Laguna, una de sus creadoras tenia una remera con un perrito de “Prisl”, le pedí fotografiarla para mi proyecto documental y ella me propuso hacer una muestra. Le llevé 238 fotos y les parecieron demasiadas . Justo estaba Sergio De Loof en la galería y él me aconsejó que pegara todas. Y así fue.



